Michaelcon Kriszta y su hija

Michaelcon Kriszta y su hija

En el concierto Domingo-Carreras del 30 de julio de 1996 en Budapest, el vestuario de los tenores estaba decorado con pinturas de la hermana de Kriszta Hafner. La idea surgió para decorar el wardrome de Michael con estas pinturas también. La hermana de Kriszta no estaba en Hungría, por lo que ella hizo los arreglos. A través de esto ella terminó siendo la asistente de Charles Bobbit. Ella era su conductor, traductor, etc. Ella también era parte del convoy que recogió a Michael en el aeropuerto. Una de las instrucciones que recibieron antes de su llegada fue que no importa lo que sucedió durante el viaje, no pudieron parar.

A Kriszta y su hija les gustaba mucho la música de Michael, y le preguntó a Charles B. si sería posible conocer a Michael personalmente. Charles dijo, por supuesto, acaba de entrar en el hotel. Kriszta casi se desmaya al escuchar esto y de inmediato le dice a su hija de 10 años que deje de hacer lo que estaba haciendo, compre un osito de peluche suave, que podría regalarle a Michael, y se apresure al hotel.

Ella recuerda que fue una experiencia increíble. Subieron a su habitación, donde estaba cenando en ese momento. Pasaron unos minutos con él, tomaron fotos, les dio carteles, fotos, autógrafos. Kriszta recordó que Michael era extremadamente agradable, amigable, sin aire alguno.

Ella pensó sin embargo que parecía que estaba viviendo su vida cotidiana en una jaula. Ella sintió que sus guardaespaldas controlaban su vida. Charles le había preguntado sobre la vida del jazz húngaro y pensó que sería una buena idea organizar una fiesta de jazz cerrada para Michael. Cuando Michael se enteró de esto, estaba ansioso por conseguirlo, pero después de que el control de seguridad revelara solo una entrada, se le prohibió ir a la fiesta.

A Kriszta se le pidió que formara parte del equipo, pero ella dijo que se negó debido a su hija pequeña. Y cuando escuchó las tristes noticias sobre Michael, por supuesto, lloró.